LECCIÓN 1. Al principio nadie sabía nada

Después de muchos meses esperando para encarar este blog como es debido, por fin es hora de hablar de arte de una vez.
Y sin más rodeos, empecemos por ser honestos. Casi nadie, ni nadie que conocemos tiene ni idea sobre arte. Me refiero a algo muy sencillo de comprobar.
Piensen en los comentarios que hacen ustedes o los que les rodean cada vez que van a una exposición.
Todo lo que suelen decir es impreciso, aleatorio, subjetivo y les hace sentir, a menudo, como unos idiotas o unos ignorantes. O bien todo lo contrario, les parece que todo lo que han visto es BASURA SNOB.
Bueno, pues lo que voy a hacer en este blog es que ustedes sepan separar el grano (el poco que hay pero muy bueno) de la paja, que es todo lo demás.
Pero, sobre todo, aquí voy a ir al grano y no a la paja, ya me entienden.
Piensen en las veces que van al cine o leen una novela o un tebeo. Saben lo que han visto o leído y, en alguna medida, saben valorarlo. Pues con el arte no es así porque incluso los que dicen que saben venden la moto (qué pena) y de lo que suelen escribir, ni ellos saben lo que quieren poner.

Respecto al blog, la idea es que ustedes colaboren en la mayor medida posible con sus dudas, aclaraciones, puestas en cuestión de lo que yo les cuente y demás, para que todo quede claro.
Así que iré creando, poco a poco, un sistema de comunicación lo más fluido (im)posible.

Y ESTA VEZ NO PASARÁ UNA SEMANA ANTES DE ENTRAR EN MATERIA.
PROMETIDO.